La gestión de activos físicos (o gestión de activos de servicio) suele aplicarse a equipos, maquinaria, dispositivos, vehículos y otros activos complejos con ciclos de vida de productos relativamente largos.
La gestión de activos físicos suele efectuarse mediante un software de gestión de activos que forma parte de un sistema de gestión del ciclo de vida del servicio (SLM). El software de gestión de activos conecta las actividades de servicio con el historial de un activo, el estado operativo, los tiempos de inactividad no planificados, los requisitos de mantenimiento regulados, la configuración actual y mucho más.
El software de gestión de activos físicos recopila y mantiene actualizada la información de los activos a medida que se realizan los servicios. También proporciona información actualizada sobre la configuración de los activos, materiales de servicio como piezas y kits, y documentación técnica que el personal técnico necesita para prestar servicios rápidos y a la primera. El software también proporciona un ecosistema abierto que es visible y accesible para los OEMs, clientes y terceros que intervienen en la prestación de un servicio eficaz de activos gestionados.
Un gemelo digital completo y procesable, es decir, una representación virtual que contenga la estructura física actualizada del activo gestionado, es fundamental para la gestión de activos físicos. Este gemelo digital abarca todos los componentes mecánicos, eléctricos/electrónicos, de software y relacionados con los documentos de cada activo, así como el estado y el historial de su uso operativo.
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